Pues yo sí que la he probado hoy y cuando me subí en ella iba dispuesto a encontrarle todos los defectos y decirle luego al Tuercas que se había comprado una mierda de moto y que ya quisiera él poder tener una moto si quiera semejante a mi KTM 525, cosa que me hubiese satisfecho enormente, pero cuando me bajé de la moto sólo pude decirle una palabra: "impresionante".
La moto va increiblemente bien, se maneja como un juguete, la dirección es precisa, la moto se siente tremendamente manejable y te transmite seguridad a raudales y el motor es absolutamente impresionante, tracciona de forma lineal sin vacios de potencia y de forma muy noble. No asusta, pero cuando le buscas las cosquillas te da una patada que te pone los pelos de punta, pero todo bajo control.
Una máquina para disfrutar.