Bueno, pues por lo menos al final quedó como excusa para pasar el fin de semana en compañía de buenos amigos. Con respecto al amigo Fernando, manda gí¼evos que después de cruzar Europa y más de 19.000 kms con un barco de 500 kg, venga a caerse al lado de casa y con un scooter. Espero que haya sido leve y se recupere pronto...